Creado por Wilbur Schramm en la década de los setenta, este modelo de comunicación también es conocido “Modelo de la tuba” o “Tuba de Schramm”. Se conforma por una fuente, un emisor, una salida de información (Output), receptores con sus percepciones y relaciones (Input), y un canal de retroalimentación de la información en que los papeles se invierten.
Los hechos, medios de comunicación, el público masivo y las reacciones.
El decodificador, en voz del comunicador, retoma un mensaje que no es más que un hecho del interior, margen y exterior social; lo interpreta y comparte con la sociedad. Esta información es de importancia y relevancia para su auditorio, y es mejor conocida como noticia.
La información tiene una meta: el espectador. Al hacer contacto con el receptor, Schramm recalca la importancia de los efectos (no hay una fórmula exacta para llegar a los efectos deseados por el emisor), el mensaje será recibido por muchos receptores (destino) que, según su entendimiento, tendrán efectos diversos. Su percepción tendrá, en consecuencia, una comunicación intrapersonal y más evidentemente, una interpersonal con los individuos que lo rodean. Esta relación y combinación de opiniones deriva en la respuesta de la audiencia, según Schramm, en acciones, completando así, el ciclo con la retroalimentación.
Los hechos, medios de comunicación, el público masivo y las reacciones.
El decodificador, en voz del comunicador, retoma un mensaje que no es más que un hecho del interior, margen y exterior social; lo interpreta y comparte con la sociedad. Esta información es de importancia y relevancia para su auditorio, y es mejor conocida como noticia.
La información tiene una meta: el espectador. Al hacer contacto con el receptor, Schramm recalca la importancia de los efectos (no hay una fórmula exacta para llegar a los efectos deseados por el emisor), el mensaje será recibido por muchos receptores (destino) que, según su entendimiento, tendrán efectos diversos. Su percepción tendrá, en consecuencia, una comunicación intrapersonal y más evidentemente, una interpersonal con los individuos que lo rodean. Esta relación y combinación de opiniones deriva en la respuesta de la audiencia, según Schramm, en acciones, completando así, el ciclo con la retroalimentación.
Representación gráfica:
Subversivo
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